Fibromialgia

La fibromialgia es una afección médica caracterizada por un dolor crónico generalizado que afecta a varias partes del cuerpo o grupos de músculos. El dolor depende del sistema nervioso y de cómo procesa e interpreta el dolor. Las personas con fibromialgia tienen una mayor sensibilidad al dolor, lo que significa que la presión ligera o el aumento del trabajo muscular causan dolor. Se trata de una enfermedad compleja que no se ha investigado a fondo.  Los factores hereditarios parecen influir en el desarrollo de la enfermedad.

Los síntomas que definen la fibromialgia son el dolor crónico generalizado, la fatiga, las alteraciones del sueño y el aumento del dolor en respuesta a la presión táctil (alodinia). Otros síntomas pueden incluir hormigueo en la piel (parestesia), espasmos musculares prolongados, debilidad en las extremidades, dolor nervioso, fasciculaciones musculares, palpitaciones y trastornos intestinales funcionales.

Muchas personas experimentan problemas cognitivos (conocidos como «fibrofog»), que pueden caracterizarse por una disminución de la concentración, problemas de memoria a corto y largo plazo, consolidación de la memoria a corto plazo, incapacidad para realizar varias tareas a la vez, sobrecarga cognitiva y disminución de la capacidad de atención. La fibromialgia suele estar asociada con la ansiedad y los síntomas depresivos.

No se conoce ninguna forma de prevenir la fibromialgia. Sin embargo, es de su interés permanecer tan saludable como sea posible. Mantener una buena dieta, hacer ejercicio seguro y descansar lo suficiente son buenas reglas a seguir si espera prevenir cualquier condición médica, incluyendo la fibromialgia.

Como no se ha establecido qué es lo que causa la fibromialgia, no hay cura. La fibromialgia es una enfermedad compleja que se trata con una combinación de tratamientos físicos y psicológicos, drogas y alivio del dolor. Para aliviar los síntomas, se suele utilizar una combinación de técnicas de relajación, ejercicio físico y drogas.

El apoyo psicológico con, por ejemplo, el tratamiento con ACT (terapia de aceptación y compromiso) puede ayudar a controlar el dolor.

Consigue ayuda si:

• tienes un dolor prolongado sin una causa clara.
• tienes un dolor que afecta a la vida diaria.

Puedes contactar con APPOTEK si sospechas de fibromialgia. Una enfermera o un médico hará una evaluación individual basada en sus síntomas, y luego podrá prescribirle un tratamiento o remitirle a un examen más detallado. Nuestros psicólogos también están disponibles para dar apoyo y tratamiento con ACT.